Después de que se convirtiera en un primer gran acontecimiento, para muchos fue el evento deportivo del año, para otros el inicio de una nueva era del atletismo en el país, ya eran menos los incrédulos y muchos más los entusiastas que querían rápido acudir a inscribirse.
La media maratón de Bogotá generaba una tendencia.
Ese año unieron fuerzas, Correcaminos de Colombia, la Federación Colombiana de Atletismo, la Alcaldía Mayor de Bogotá y la empresa privada para darle vida a la segunda edición.
Los representantes peruanos se llevaron las palmas en la gran fiesta del atletismo colombiano, al adjudicarse los títulos en damas y varones con María Portilla y José Castillo, respectivamente.
Otro de los grandes ganadores con la carrera fue el público que pese a la lluvia acompañó a los casi 30 mil participantes que recorrieron las principales calles de la capital, en desarrollo de la mmB.
Junto a los mexicanos y el vencedor, el peruano José Castillo, en varones estuvieron el tanzanio Phaustin Baha, subcampeón del mundo en esta distancia y poseedor del registro orbital en la categoría juvenil con 59:37; también el ecuatoriano Silvio Guerra, el sudafricano Shadrock Hoff, a la postre segundo en la prueba; y el colombiano Alirio Carrasco, del equipo Porvenir quien fue el mejor de los locales y de paso demostró sus condiciones.
En damas la lucha la gran sorpresa la dio al colombiana Stella Castro quien obtuvo un meritorio tercer lugar, detrás de la keniata Gladys Asiba, mientras que la otra grata sorpresa la dio Carmenza Morales del equipo Agua Brisa, quien alcanzó el quinto puesto. Un total de 24 atletas en representación de 16 países concurrieron a la cita nacional.
Desde el nacimiento de la carrera la prensa ha sido parte fundamental, pero para esta versión tiene un mejor tratamiento, se introducen nuevos elementos de apoyo a los periodistas nacionales e internacionales que acuden a la prueba, instalándose tanto en salida como en llegada salas de prensa dotadas con tecnología en comunicaciones, un vehículo tarima recorre la carrera facilitando la labor en general para los comunicadores, entre otros.
El recorrido varió promediando el kilómetro once, ya que la carrera tomó al occidente por la carrera 116 hasta la carrera 38 donde empalmó con la Av. 68 hasta la calle 68 para luego subir hasta la transversal 48 y tomar hacia el sur hasta la calle 63, meta de la prueba.
Se instaló el servicio de guardarropa desde sitio de salida (Plaza de Bolívar) al de llegada (Parque Simón Bolívar).
Con el interés de seguir creciendo en todos los aspectos del engranaje de la competencia se creó la Expomedia, la feria del deporte y la salud, donde los corredores recibieron su kit del atleta en el Centro de Convenciones Gonzalo Jiménez de Quesada, para luego disfrutar de una gran variedad de regalos y novedades de los patrocinadores.
